12 de Septiembre de 2011
Aprendizaje Inteligente fue el tema de la charla dictada por Pablo Menichetti
Con una gran concurrencia de egresados e hijos, el sábado 10 de septiembre se dio inicio a la charla: Aprendizaje Inteligente dictada por el ingeniero comercial Pablo Menichetti en la FEN."En cada niño hay un genio potencial" es la frase inicial de este entrenador de vidas, que trabaja con jóvenes y niños desde los 7 hasta los 18 años para entregarles las herramientas que los lleven hacia el éxito en una sociedad global y competitiva. Menichetti importó esta técnica desde Singapour, donde él mismo viajó para ser entrenado y donde luego decidió impartir los conocimientos que hoy lo sitúan en el top del asesoramiento personal. Luego Pablo explica: "enseñamos técnicas de aprendizaje, pero también a administrar las emociones, porque los niños deben aprender de acuerdo a la nueva realidad en la que están insertos y es por eso, que muchas veces los papás no pueden lograr encaminar a sus hijos y necesitan una mirada externa que los ayude".
Menichetti prosigue con el hecho que hay un enfoque erróneo, ya que nos preguntamos ¿qué enseñar?” y no “¿cómo aprendemos?” o “¿cómo enseñamos?”. “Todos aprendemos de forma diferente”, menciona Pablo. Continua con: “cuando un hijo está equipado con las actitudes correctas, así como estrategias académicas y personales, podrá dar rienda suelta a su potencial y sobresalir en las diferentes áreas de sus vidas”.
Técnicas que pueden ser simples según Menichetti, pero que los escolares ni los padres saben poner en práctica. "Los niños tienen muchas preguntas, les preocupa no poder rendir lo que se espera de ellos y sobre todo, no tienen métodos de estudio eficiente", cuenta Pablo. Ante ello, el ingeniero comercial entrega algunos tips para el éxito, los cuales profundiza en su taller. Dentro de las habilidades y hábitos personales destaca la importancia de la motivación interna positiva y la autoestima. Con la motivación, los hijos aprender a vivir cada momento del día, terminar con la limitación de su propia imagen y las actitudes negativas. Con la autoestima, los estudiantes comienzan a disfrutar de la felicidad y la satisfacción que derivan de sus estudios y de su vida personal. Otras habilidades personales son los objetivos claros y la planificación del tiempo. Gracias a los objetivos claros, los jóvenes le dan un mayor sentido a sus acciones. Con la planificación del tiempo, se convertirán en personas más organizadas, efectivas y disciplinadas. "Las técnicas que enseñamos les sirven para todos los ámbitos de la vida y para siempre, sólo deben saber cómo aplicarlas y eso lo aprenden en los talleres", detalla el coach.
Memorizar rápidamente y en orden 30 palabras claves de un texto, es una de las herramientas sensoriales que permiten una lectura eficiente y una comprensión lectora óptima. Si a eso además se le agregan imágenes y dibujos el niño logra un aprendizaje entretenido, dice el especialista. "La gente cree que tienen mala memoria y no es así. El problema es que no sabemos cómo recuperar la información que tenemos guardada en la mente y simplemente debemos asociarla a números, colores o algo que tenga sentido para el alumno y todo pareciera volver mágicamente a la memoria", detalla Pablo. Ciertamente esto lo demostró cuando llevó acabo un ejercicio práctico con los hijos de nuestros egresados.
Luego del ejercicio práctico, Pablo Menichetti aseguró que el famoso síndrome de distracción constante en los niños no existe. "Hace 10 años este problema casi no existía, en cambio hoy cada vez tenemos más casos y por ende más niños dopados con medicamentos para lograr tenerlos quietos en las salas y el problema no son los niños, si no el método de educación que se les imparte", sentencia Menichetti.
El couch estudiantil afirmó que los jóvenes actuales necesitan una metodología de estudio que vaya acorde a su sistema de vida y al medio en que viven. "Un sistema de educación creado hace 100 años atrás no puede servir para un niño que hoy está conectado a Internet desde que nace. Entonces es obvio que se aburra y que tenga un aprendizaje pasivo", aclara.
La solución entonces es simple, capacitar a los profesores para entregar nuevos métodos de trabajo para que el niño aprenda de manera divertida, sin espacios para el aburrimiento o que simplemente sienta que ir al colegio no es una obligación más.
"Detalles tan simples como poder permitirle a un niño escribir en el cuaderno con lápices de colores y eliminar el gris de las salas de clases sería un primera solución positiva. Porque la primera respuesta que entrega un niño al preguntarle por qué va al colegio, es porque me obligan mis papás y no porque me gusta aprender", expone Menichetti.
Al finalizar, Pablo Menichetti invitó a todos los asistentes a participar del Programa Super Genius, el cual ha sido desarrollado basado en las últimas herramientas educacionales utilizadas en Singapur y en el sistema SIA (Sistema Integral de Aprendizaje).
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