Egresadas por el mundo: Carolina Ruiz, una chilena en Barcelona
Hoy destacamos a Carolina Ruiz, egresada de Ingeniería Comercial con Licenciatura en Ciencias de la Administración de Empresas en 2007, quien durante 2021 decidió tomar sus maletas y emigrar hacia España, motivada por formar una vida acompañada de su pareja tras 3 años de relación a distancia con constantes vuelos al continente europeo.
Gracias a su excelente desempeño laboral, Carolina obtuvo el apoyo de su empleador, pudiendo adaptar su cargo a un programa remoto en orden de poder continuar su trabajo desde España.
“Trabajo desde 2015 en Duracell y tuve la suerte de que mi empresa y manager me apoyaron desde el primer momento, dándome la oportunidad de tomar un rol global desde Barcelona. Aquí trabajo con un equipo multicultural que vive en distintas partes del mundo y a pesar de las diferencias horarias, puedo manejar mis tiempos para intentar balancear lo mejor posible mi vida personal y profesional”.
En este sentido, Carolina reconoce la importancia que ha tenido su formación personal y profesional en torno a las habilidades y capacidades requeridas para trabajar en un espacio multicultural, además de los desafíos que implica su trabajo en finanzas, específicamente el entorno del consumo masivo, el cual evalúa como dinámico y exigente. “La carrera me preparó no sólo en temas técnicos financieros, contables y de gestión, sino también para trabajar en equipo, colaborar para conseguir un objetivo común y desarrollar mi capacidad analítica para plantear soluciones creativas a los problemas de negocio a través de la imaginación con la información disponible”.
A pesar de mantener su trabajo desde Chile y encontrarse familiarizada con España y su cultura, reconoce que su vida ha dado un giro en 180°, adaptando nuevos hábitos a su rutina, aunque sin dejar de extrañar las costumbres latinoamericanas propias. “Barcelona es bastante cosmopolita y me gusta mucho vivir aquí y haber construido un hogar con mi pareja; aunque extraño los asados, la familia, los amigos y la cordillera”. Sin embargo, gracias al apoyo de su pareja y los esfuerzos por educarse mutuamente en sus diferentes culturas, ambos han logrado rescatar dialectos, comida, música y vinos, lo cual le ha permitido a Carolina siempre sentirse conectada con Chile.
Respecto a su positiva experiencia, nuestra egresada recomienda sin dudas el salir del país para explorar las posibilidades laborales en el extranjero, habiendo vivido 2 años en Panamá previamente, en donde aún mantiene sus amistades que la acompañaron durante su primera aventura migratoria. “El estar lejos de tus afectos naturales, te lleva a construir relaciones profundas con más rapidez y a valorar las que tienes. En mi caso, creo que he crecido y aprendido a adaptarme, a desarrollar la paciencia y sobre todo a abrir mi mente a nuevas culturas, experiencias y formas de pensar”.