14 de Agosto de 2008

EGRESADOS DE FEN EMPRENDEN NUEVOS RUMBOS EN HARVARD Y EL MIT

Pablo Zutta MBA en Massachusetts Institute of Technology (MIT) Cargo Actual: Subgerente de Finanzas Corporativas en Santander Investment “En lo profesional, siento que comenzar un MBA redondea un buen ciclo laboral y me prepara para el siguiente. Tomarse una pausa después de unos años trabajando para volver a tomar fuerza y enfocarse es lo mejor. Una nota para los alumnos de mi querida escuela: jamás tomen decisiones pensando solamente en dinero. Es un driver, sí que lo es. Pero definitivamente no es el más importante. Si tienen la posibilidad no escatimen en invertir en sí mismos. Después de un par de años trabajando, van a tener recursos, y si son motivados, también la fuerza para hacer mil cosas. Cuando se les presente la oportunidad de hacer algo, no lo piensen mucho, sólo háganlo. El tiempo vale más que el dinero, no lo olviden. De mi paso por la Facultad lo que más rescato es el buen nivel académico. Recuerdo que muchos llegaban de otras escuelas buscando un mayor desafío, y otros emigraban a otras escuelas porque simplemente no se la podían. Obviamente, las excusas de estos últimos eran miles y “muy justificadas”, pero lo que me sorprendía es que al emigrar a otras escuelas les iba increíble. Lo que me hablaba de lo fácil y poco desafiante que tenían que haber sido esas otras escuelas, y de lo intensa que era la nuestra. Definitivamente, si uno busca la mejor formación, en la Chile está muy bien parado. Sabemos que en Chile, cuando uno quiere realmente ser un Ingeniero Comercial, con todas sus letras, solo puede ir a dos escuelas. Esta es una de ellas, y para mí, la mejor. Otro punto destacable, no tan evidente, y del que te das cuenta después, es la universalidad. Aquí recuerdo el brillante discurso que un ex compañero y muy amigo, diera en la ceremonia de cierre. La variedad de la gente, sus historias y visiones, son todas tan diversas que son un aporte en todo sentido. ¿De qué te sirve ir a un lugar donde todos son iguales? La idea es justamente que la heterogeneidad te abra los ojos y te de una visión más amplia del entorno. Un tema que siempre es destacable, son los lazos de amistad generados. Si uno es abierto a generar estos nuevos lazos y tu idea es compartir, evidentemente es un buen lugar. A pesar de ser una escuela competitiva en lo académico, siempre hay espacio para “vivir”. No recuerdo la cantidad de fiestas, carretes y varios a los que fui, pero fueron muchos. La vida fuera del estudio también fue intensa, lo recuerdo bien. Que manera de pasarlo bien en aquella época. Como no destacar por último, que cuando uno sale de la escuela tiene las puertas abiertas en el mercado. ¿Acaso no es agradable que cuando estás estudiando, cuando te entrevistan y en tu vida laboral, siempre que te pregunten dónde estudiaste y tú respondas “en la Chile”, recibas un gesto de aprobación, admiración o felicitación? Y eso es algo que te seguirá toda la vida. Créanlo, toda”. Chien Lee MBA en Harvard University Cargo Actual: Associate The Boston Consulting Group “Decidí hacer el MBA porque lo veía como un paso natural a la carrera que elegí. Siento que una de las cosas más importantes de la vida es aprender sin importar el lugar en donde uno esté. Habiendo pasado un tiempo en consultoría sentía ganas de seguir aprendiendo, y en ese sentido el MBA es una gran oportunidad. Decidí estudiar en Harvard por diferentes motivos. Primero, por el método de enseñanza a través de la discusión de casos. En la Facultad tuve un par de clases donde se usaba este sistema y fueron las que más disfruté. Lo segundo es la ciudad, Boston, que es un muy buen lugar para vivir, y siendo una ciudad grande, ofrece más posibilidades para mi señora, a quien conocí en la Facultad. Finalmente el prestigio de la universidad es un factor importante, te abre mucho las puertas en tu futuro laboral. Tengo altas expectativas de poder aprender mucho, tanto en la parte académica como desde un punto de vista de conocer mucha gente de diferentes perfiles, trabajos previos y nacionalidades, aparte obviamente de la oportunidad de experimentar cómo es la vida fuera de Chile por un tiempo prolongado. La Facultad me preparó muy bien para el mundo laboral. En términos académicos, la calidad de los profesores y la forma en la que se enseña, en donde por el nivel de exigencia y los ramos que se dan forman una disciplina analítica que se valora mucho en el mercado. Por lo mismo, como cuesta sacar la carrera adelante también se aprende a ser muy comprometido con todas las cosas que se hace, lo que también es algo que nos distingue como ingenieros comerciales de la Chile. Afortunadamente las puertas a mi trabajo están abiertas, de hecho es parte de la carrera el irse a estudiar un posgrado -generalmente un MBA- entre dos y tres años de estar en la empresa para pasar al siguiente nivel jerárquico. No he definido aún qué es lo que voy a hacer, siento que una vez que esté allá las posibilidades de probar diferentes cosas se multiplican y es mi intención hacer la práctica laboral obligatoria que hay entre el primer y el segundo año en otra industria y otro tipo de trabajo, para ver qué ofrecen otras experiencias laborales y de ahí decidir mi rumbo”.